- Tío, ¿viste ayer la película que pusieron en la tele? – le decía Antonio a Edu. Ambos eran policías y estaban patrullando la ciudad en ese momento en su C4.
- No, ¿Qué película era?- contestaba Edu.
- Joder, tío, era una de Steven Seagal, tío, ¡¡de Steven Seagal!!
- ¿Una de patadas y de puñetazos? – adivinaba Edu.
- Si, tío, que guapa la peli.
- Sabes que esas pelis no me van…
- ¡A esas pelis debería de gustarle todo el mundo! ¡Están que te cagas! – decía Antonio.
En ese momento vieron a una hermosa chica por la calle. Aparentaba, más o menos, unos 17 años.
- ¡Joder, como está la niña! – decía Antonio.
- Tío, es una niña de 17 años ¿Cómo puedes tener esa mente tan perversa?
- Tío, no he dicho nada malo. He dicho: “¡Joder, como esta la niña!”. Eso no significa nada. – se justificaba Antonio.
- ¿Qué no significa nada? ¡¿Qué no significa nada?! ¡Con esa frase has dado a entender…
- ¡He dado a entender ¿qué?!
- ¡Aquello que has pensado en el momento que lo has dicho, joder! – decía cabreado Edu.
- ¡No! Tú piensas que yo he pensado algo que tú has pensado.
- ¡Mentira! ¡¡Lo has pensado!!
- Vale, he pensado en algo, pero no lo que tú crees que he pensado – cayó rendido Antonio tras la imbecil discusión.
- ¿Y yo que he pensado?
- ¡¡Ah!! No sé ¿Y yo que he pensado? – le preguntaba Antonio.
- No se, tu sabrás – contestaba Edu.
2 comentarios:
Jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja
[No comment]
Comentarios como los tuyos no hace falta mas palabras...solo con eso se lo que estas pensando.
Saludos, amigos.
Paciente nº007
Publicar un comentario